La revolución prevista por Emilio Pérez Touriño dentro del partido se quedará en mero ruido e, incluso, es posible que Carlos Príncipe se salga con la suya. El grupo de colaboradores directos del secretario general del PsdeG -Rego, Louro y Lola Villarino- no son partidarios de llevar a cabo cambios significativos, sobre todo, si ello significa integrar al sector crítico. Temerosos de perder influencia sobre el líder, se muestran contrarios a realizar algunos cambios. Al fin y a la postre, se consideran los protagonistas de los "buenos resultados" obtenidos el 21-O, por lo que rechazan los cambios que alienta la dirección Federal. Con Pepe Blanco a la cabeza.