Por Telmo Martín | | 11/01/2011
Pasaron las elecciones municipales y seguimos insistiendo en nuestra idea de un nuevo hospital. Así el 30 de agosto del 2007 presentamos en el registro municipal una proposición y la solicitud de un pleno extraordinario para impulsar el tema. Nuestro objetivo era intentar convencer a Lores para reclamarle a Touriño un nuevo hospital. Como siempre, fue en vano. El Alcalde, pese a ser médico y saber de sobra las ventajas que un nuevo hospital suponía, prefirió hacer partidismo evitando cualquier apoyo a la propuesta del PP. A estas alturas sabe de sobra que se equivocó.
Un año después de aquel Pleno y unos meses antes de las elecciones autonómicas, le pedí a Feijóo 3 cosas si gobernaba: saneamiento del rural, un nuevo hospital y el traslado de Ence. En junio del 2009, en la primera visita institucional de Feijóo a Pontevedra, cumplió su palabra y comprometió el nuevo hospital. Aquel día se puso en marcha un proceso administrativo que está avanzado a una velocidad poco habitual en una administración. En menos de 18 meses se ha aprobado el decreto de supramunicipalidad, el plan funcional, el plan de espacios, el proyecto de accesos y el proyecto del hospital, que se presentó el pasado 27 de diciembre.
En la presentación, Feijóo se comprometió a que el hospital estaría en funcionamiento en el 2014. Pero creo, sinceramente, que se mejorará ese plazo. ¿Qué nos queda por delante?:
* Primer trimestre 2011: exposición proyecto de viabilidad económica.
* Segundo trimestre 2011: licitación de la construcción del hospital.
* 2º semestre: inicio de las obras.
Sobre las características del nuevo hospital creo que las fotos y el vídeo (que podéis ver si pincháis aquí) hablan por sí solos. Pero me gustaría destacar 2 aspectos importantes. El carácter global del proyecto, que contempla desde una alta tecnificación que redundará en la calidad de la atención sanitaria, hasta la planificación de accesos, aparcamientos y entorno. Desde el punto de vista arquitectónico destaco el gran patio interior cubierto y longitudinal que hará del hospital un edificio humano y alegre. También la utilización de materiales autóctonos como la pizarra y el granito.
Creo sinceramente que el nuevo hospital de Monte Carrasco inaugura una nueva etapa en Pontevedra. Una etapa en la que los pontevedreses aspiraremos a lo mejor. Por muy difíciles que sean los tiempos, si trabajamos más y sumamos el esfuerzo de todos podremos hacer realidad proyectos que antes ni imaginábamos. Yo, al menos, trabajo con esa ilusión.