Por Galicia Confidencial | Galicia | 29/11/2005 | Actualizada ás 14:07
Es habitual que la cadena de mando intente ocultar situaciones problematicas para que no trasciendan a la opinión pública y lo único que se consigue es que el conflicto se radicalize y acabe en los tribunales militares.
Hechos recientes como el del cuartel de Becerrea en Lugo, y el de A Guarda en Pontevedra, son fiel reflejo de la conflictividad interna que vive la GC en Galicia, donde el número de agentes con depresión es alarmante y la frustación personal cada vez mayor al comprobar que casi todas las denuncias que se interponen y que acaban en Tribunales Militares, terminan por archivarse.
El Gobierno y nuestros mandos con su actitud estan elevando la crispación en la guardia civil a cotas nunca vistas, y desde ASIGC, demandamos que de manera urgente se de una respuesta eficaz a esta conflictividad que perjudica seriamente a los propios guardias, sus familias, la imagen de la guardia civil y por último, al ciudadano.
Desde la delegación gallega de ASIGC, recomendamos a todos los guardias civiles que se encuentren en una situación de acoso laboral que interpongan de manera inmediata denuncias ante los Tribunales ordinarios de Justicia, y que contacten con las distintas asociaciones para solicitar asistencia juridica."
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